La verdad es que pasan los días, y cuando uno se pone a pensar en lo que se viene logrando con el elenco del Walter Ormeño, en el presente año, la verdad es que cuesta creerlo, pero es cierto. Estamos a dos partidos de la clasificación para la Etapa Nacional... hemos avanzado cada una de las etapas que nos ha tocado jugar... la distrital, campeonando en penales... la provincial, campeonando en penales... la departamental, siendo segundos luego del Deportivo Municipal... y ya son tres las etapas avanzadas, estamos en la cuarta, y todo apunta a que hilando fino y sin perder la humildad con la que se ha trabajado, dejando a un lado la soberbia, debemos de llegar a ser finalista de la etapa regional... y estaríamos avanzando cuatro etapas de las cinco que tiene la Copa Perú... y de esa manera clasificar a la Etapa Nacional, a codearnos con los 16 mejores elencos de todo el país.
Y aunque a muchos no les guste, o les cueste aceptar la campaña que viene realizando el Walter Ormeño... hay gente que se ha sacado la mugre por llegar hasta aquí... gente que quizás no figura, pero que en cierto momento pusieron su granito de arena, y que hoy sueñan con el retorno a primera división.
Palmas para la presidencia, porque ha sabido darle al elenco lo que necesito en el momento que lo necesito... en esta Copa Perú, hay que quitarnos la venda de los ojos, un factor muy importante es el dinero... y pese a que hay elencos que tienen un presupuesto muy alto para todo el año... el Walter Ormeño ha sabido sortear esta valla, con mesura, con trabajo, con aportes de pocos... pero con el apoyo de una hinchada que ha puesto lo que tenía que poner, su presencia, para hacer mas accesible el camino.
En ese aspecto la mano firme de Percy Alcalá ha sido importante... buscando los recursos cuando no los había, poniendolos casi siempre con sus familiares más cercanos, con el apoyo invalorable de Víctor Hugo Carbajal, de Freddy Rojas, de Luis Ranilla, de Nemesio Soriano, de Gregorio Huarache, de Pepe Carpio, Juan Carlos Yupán y Juan Torres, entre sus directivos... pero también de su esposa, hija, hermanos y sobretodo de su padre... quien lo ha venido acompañando en cada viaje, en cada partido... y le ha hecho más sostenible el camino.
Muchos han puesto su cuota, esa cuota de trabajo o de dinero que ha sido necesaria para que el carro siga andando. Se ha tomado decisiones duras, si... como cuando se le tuvo que decir hasta aquí nomás a Samuel Eugenio, a Victorino Vicente o a Santiago Espinoza... pero se tomaron esas decisiones porque se quería lo mejor para el equipo.
Se perdonó cuando se tenía que perdonar, a Eduardo Cotillo después de su primera falta, pero ya no se pudo perdonar después de la segunda, porque se alentaba a la indisciplina.
Se perdió en el momento justo, cuando una derrota no te eliminaba, pero si te hacia entender que todavía faltaba mucho para ser el elenco que uno quería... un elenco indestructible, un elenco que azotara todo a su paso...
Se ha perdido cuatro veces, y las cuatro veces el elenco albo se ha levantado... y eso es bueno... hay capacidad de recuperación... hay instinto de supervivencia... hay ganas de consagración... hay temperamento de equipo.
El Walter Ormeño, viene haciendo una campaña meritoria, fruto de la mano firme y de la solvencia de su dirigencia... fruto de su indesmayable hinchada... fruto de la sapiencia de sus técnicos... fruto de la vehemencia, fé indesmayable, y trabajo denodado de sus jugadores... Esta es la campaña del Walter Ormeño, que se sostiene en muchos pilares... que pese a que en algún momento, trabajo en forma desunida... hoy su gente, se une como la única forma de llegar al puerto final...
Walter Ormeño después de muchos años ha vuelto a ser protagonista... después de muchos años ha vuelto a ser el elenco que arrastra pasiones y multitudes... después de muchos años ha vuelto como el ave fénix, resurgiendo de sus cenizas, saliendo de la sombra en la que se encontraba... y por la fuerza con la que ha vuelto, es que creemos que hoy más que nunca, todos debemos de remar en la misma dirección.
Quizás el domingo se gane... como esperamos todos, pero entonces que no nos gane el triunfalismo, y creamos que la clasificación a la nacional ya se ha conseguido... redoblemos esfuerzos para seguir alentando, para seguir llenando estadios, para seguir ganando, no importa con cuantos goles, sino ganar, ganar y ganar... que nadie nos prive de este momento de felicidad que estoy seguro vivimos todos los cañetanos...
Hay que seguir trabajando con humildad, con unión de todos... y sobretodo pedir a esos desadaptados que nos hacen quedar mal, que queremos una hinchada que aliente todo el partido, que presione en buena lid al rival y al árbitro... que no haya desmanes, empezemos por mostrar que así como el Walter Ormeño ha vuelto para ser grande, tiene una hinchada que también aprende de sus errores, y que puede ser catalogada como la mejor hinchada de la Copa Perú... así que muchachos a seguir apostando para que el león del Oscar Ramos siga rugiendo.
No hay que parar hasta devolver al Walter Ormeño a primera división, donde siempre tiene que estar.
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