Escribe: Marcelino Antonio Agapito Manco
(CRÓNICA: Extracto de la obra k’ronicas de Cañete del autor)
Cañete tiene un nombre de lujo en la galería de grandes deportistas del futbol peruano, señorial virtud que nos hace sentir orgullosos, porque pasará el tiempo, pero permanecerá la gloria, el título de ídolo nacional y del Club Universitario de Deportes.
POR ÉL ME HICE HINCHA DE LA «U»
Recuerdo que cuando niño me hice hincha de la «U», fue un sentimiento especial al conocer que de mi tierra era «Lolo» Fernández, mis padres casi a días de haber nacido en la década del 70, compraron un terreno de 3 Has. en el Fundo «El Conde» al lado de la ex hacienda Hualcará, sólo separado por el canal de irrigación de «María Angola» lugar donde me bañaba con su entonces aguas cristalinas, frescas y puras, nos escondíamos en su larga pasarela de carrizos, ha escondida de los hacendados con los guardianes hacíamos trueque de manzanas por naranjas, a veces nuestros padres nos daban una «propinita» para los guardianes, que eran muy buenos porque por un sol nos daban casi un costal lleno de naranjas –el mismo gesto y cantidad lo hacíamos con las manzanas– así era, aunque no lo crean, los tiempos aquellos.
«MARIANGOLA» Y SUS FRESCAS AGUAS CRISTALINAS
Allí en el baño de las calmadas aguas de «mariangola» como por eufonía lingüística se le conoce, también en las polvorientas y vibrantes tardes deportivas, o noches de tertulias conocí una interesante biografía. Se vivía un clima alegre y de paz campestre, la sinfonía del canto de las avecillas, la hermandad vecinal y por supuesto saboreando las ricas y jugosas «naranjas hualcará», conocí al ídolo, porque todos hablaban de «Lolo», de sus inicios, sueños y hazañas, tan grande que sólo jugó por un solo equipo durante su vida – La «U»- lo sacrificó todo por el amor a una camiseta, fueron casi 30 años de mi vida que tuve el contacto directo con Hualcará de manera intensa, mis padres sembraban manzanos, como muchos San Antonianos o Maleños que fueron a fructificar esas tierras adquiridos a «Los Ramos», incluso algunos se quedaron para siempre, éste privilegio le agradezco a DIOS, y al destino que guiaron a mis padres a aquel lugar.
LA BONITA VECINDAD
A pesar de que estudiaba en San Antonio (Primaria y Secundaria) mis padres nos llevaban al campo (junto a mi hermana mayor Marta) era los viernes por la tarde o sábado por la mañana, para ayudarlos, ese era nuestro recreo y no reniego, al contrario les agradezco; llegado diciembre empezaba los preparativos y apenas terminaba la clausura escolar enrumbábamos hasta abril a estas fértiles tierras, mi vecina fue Zulma Matumay Santos (actual alcaldesa de Nuevo Imperial) por supuesto ella varios años menor, lo conozco desde que estaba en los brazos de su digna madre – espero que haga una brillante administración y no se olvide de sus raíces, ella conoce el trabajo y también la palabra pobreza y sufrimiento, soy testigo – bueno cuando empezaban las clases en abril retornábamos al mismo esquema de vida.
EL «CORRETEO Y
COTORREO» EN EL FUTBOL
Recuerdo que correteábamos sin zapatos, hasta jugábamos a la pelota, haciendo de «Lolo» u otros ídolos del futbol de la época, la poca transitada vía carrozable se transformaba en cancha de futbol, buscábamos las zonas espaciosas, poníamos un par de piedras, «de esquina a esquina y arco a arco», en un cerrar de ojos como abejas en un panal por la miel, aparecían muchos niños de alrededores, cuanto reniego debemos haber causado a don Diomedes Santos, don Pedro Yaya, don Pablo Yaya, don Nicolás Yaya, don Pedro Quiroz, don Serapio Soriano, don Cañetano Mendoza» don Pedro Lescano, Amador Camacho, don Jesús Francia, don Alejandro Chauca, don Juan Francia, don Nazario Portugués, entre otros, sus terrenos con cosechas hacían de graderías y obligadamente teníamos que «pisarlos» …algo más, disculpe el repetitivo de «don» pero era una costumbre de respeto y distinción, que hoy lamentablemente se va perdiendo.
GOL DE «LOLO»
Recuerdo que fueron muchas veces que en cada gol, yo y mis compañeros, no decíamos nuestro nombre, sino que al momento del gol nos hacíamos llamar en nuestra inocencia «Lolos». Gracias amigos lectores por su comprensión, pero mi alma de niño que guardo todavía en mi adultez (47) no puede detenerse en decir que yo también conocí al gran «Lolo» por él me hice hincha de la «U», luego lo confirmé con el «granítico» Gran Capitán de América, Héctor Chumpitaz Gonzales, por naturaleza, nacimiento y suerte, también cañetano.
RECORDANDO AL ÍDOLO
El 17 de setiembre de 1996 falleció uno de los más grandes futbolistas que Perú ha tenido: Teodoro ‘Lolo’ Fernández. Y a 15 años de su partida, los hinchas del equipo crema quieren rendirle homenaje a su ídolo más grande.
El día viernes 16, sábado 17 y domingo 18, se realizará una exposición en el Estadio Monumental en honor a uno de los artilleros más queridos y representativos del fútbol peruano.
Los Horarios para ingresar al Estadio son los siguientes:
Viernes 16 de Setiembre de 3pm – 6pm. Sábado 17 de setiembre de 9am – 1pm. Domingo 18 de Setiembre de 9am – 6pm
El ingreso tiene un precio simbólico de S/. 2.50 y el estacionamiento es gratuito. El ingreso será por la puerta N° 6 del Monumental, entre las tribunas de Norte y Occidente..
No hay comentarios.:
Publicar un comentario